Detectar altas capacidades en casa puede parecer complicado, pero muchas veces las señales están ahí, solo que no las identificamos como algo “diferente”. No se trata de tener un hijo que saca sobresalientes, sino de observar cómo aprende, cómo piensa y cómo siente.
Algunas señales comunes incluyen una curiosidad constante, preguntas profundas para su edad, rapidez para aprender conceptos complejos, necesidad de estímulo intelectual, sensibilidad emocional o dificultad para adaptarse a rutinas rígidas. También es habitual que se aburran con facilidad o tengan intereses poco comunes.
Si te estás haciendo esta pregunta, ya es una buena señal: conoces bien a tu peque y algo te llama la atención. El siguiente paso no siempre es hacer una prueba inmediata, sino observar, anotar lo que ves, hablar con docentes y buscar orientación. En Sapiencial Tech, puedo ayudarte a entender si tu hijo necesita una atención distinta y cómo acompañarlo con calma, sin prisas ni etiquetas apresuradas.